
Tipos de fresas en odontología: Una guía sencilla
Índice
Introducción a las fresas dentales: Herramientas básicas en odontología
Cuando empecé en la odontología, aprendí muy rápido: si quieres ser bueno, tienes que conocer tus fresas. La primera vez que cogí una pieza de mano, me sentí emocionado y un poco perdido. Había tantas formas, tantos tipos y un montón de detalles que descifrar. Cada fresa tenía un uso especial.
En mi trabajo, las fresas son como los pinceles de un pintor: cada una me ayuda a crear algo diferente. Elegir la fresa adecuada no es sólo cuestión de rapidez. Se trata de obtener buenos resultados y hacer las cosas fáciles y seguras para mí y mis pacientes. En esta guía, le mostraré las principales fresas que utilizo, qué las hace especiales y qué he aprendido sobre cómo elegir la adecuada para cada trabajo dental.
Tipos de fresas dentales por material
Lo primero que tuve que entender fue cómo se agrupan las fresas según el material del que están hechas. Descubrí rápidamente que el material lo cambia todo: cómo se siente la fresa, qué puede cortar y cuánto durará. Esto es lo que hay que saber.
Fresas de carburo
Si ha trabajado en una clínica dental, las habrá utilizado. Las fresas de carburo están hechas principalmente de carburo de tungsteno. Cuando utilicé carburo en lugar de acero por primera vez, no podía creer lo mucho más rápido que era. Cortan el esmalte y el metal con facilidad, por lo que son ideales para hacer cavidades y coronas.
- De qué están hechos: Carburo de tungsteno, que es más duro que el acero.
- Lo rápido que cortan: Los bordes afilados de las fresas de carburo cortan los dientes rápidamente. Yo utilizo las de corte sencillo para trabajos controlados y las de corte transversal cuando quiero extraer empastes antiguos con rapidez.
- Para qué los uso: Extracción de empastes antiguos, moldeado para nuevos empastes y trabajo de coronas.
- Cosas buenas: Rápido, preciso y no se bloquea si se adapta la fresa al trabajo.
- Cosas malas: Pueden "saltar" si su agarre no es firme y son demasiado ásperas para la porcelana o la cerámica.
Cuando quiero hacer cosas rápidamente con menos cambios, elijo un carburo.
Fresas de diamante
Las fresas de diamante cambiaron las cosas para mí cuando empecé a hacer trabajos más cosméticos. Las puntas están recubiertas de pequeños diamantes pegados a una varilla metálica. Para mí, las fresas de diamante son como un papel de lija muy fino.
- Qué duros son: Las hay finas, medianas y gruesas. Yo utilizo las gruesas para cortar rápido, como cuando preparo carillas, y las suaves para pulir o arreglar porcelana.
- Para qué los uso: Recortar dientes, dar forma a coronas de porcelana y acabar empastes de composite.
- Cosas buenas: Dan un acabado super liso y funcionan bien en materiales quebradizos como la cerámica.
- Cosas malas: Se calientan rápido, por lo que necesitas rociarlas con agua, y pueden obstruirse si no las limpias.
No se puede hacer odontología estética sin fresas de diamante.
Fresas de acero (acero inoxidable/acero al carbono)
Ya no cojo mucho las fresas de acero, excepto cuando trabajo con material blando o enseño a los estudiantes a usarlas.
- Detalles: Más blandos que el carburo o el diamante. Funcionan mejor a bajas velocidades.
- Para qué los uso: Deshacerse de caries blandas, cambiar modelos de laboratorio o pequeños trabajos que no necesiten fresas superafiladas.
- Cosas buenas: Producen menos calor, son suaves con la encía y los tejidos blandos, y las verás en todos los laboratorios para hacer modelos o recortar.
- Cosas malas: Se desafilan rápidamente y no funcionan muy bien sobre esmalte duro o metales.
Las fresas de acero me recuerdan que no siempre se necesita la herramienta más dura; a veces es mejor la más blanda.

Tipos de fresas dentales por forma y diseño de la cabeza
Aquí es donde la cosa se pone interesante. Cada fresa tiene su propio aspecto y, una vez que las conoces, puedes elegir la adecuada fácilmente. En la facultad de Odontología, tuve que aprenderme todos los números y formas y no estaba seguro de si alguna vez los utilizaría todos. ¿Y ahora? Las uso todos los días.
Fresas redondas
- Los uso cuando: Quiero empezar una caries, hacer un pequeño agujero o limpiar caries.
- Cómo los uso: Ideal para llegar al fondo de una caries y sacar el diente malo.
Fresas de cono invertido
- Los uso cuando: Necesito aplanar el fondo de una cavidad o hacer surcos para que los empastes se queden dentro.
- Cómo los uso: Son mi elección para dar a los rellenos algo a lo que agarrarse.
Fresas en forma de pera
- Los uso cuando: Quiero una fresa que pueda realizar muchos trabajos, especialmente la primera parte de arreglar una caries.
- Cómo los uso: Los lados redondos me permiten hacer paredes lisas en una cavidad. Si voy a usar composite, suelo coger esto primero.
Fresas de fisura (rectas y cónicas)
- Los uso cuando: Necesito hacer paredes rectas o inclinadas, especialmente para coronas.
- Cómo los uso: Las rectas cortan el diente con facilidad. Las cónicas ayudan a igualar la inclinación natural del diente o a prepararlo para una corona.
- Corte liso frente a corte transversal: El corte transversal corta más rápido; el liso es mejor para un tacto ligero.
Fresas de llama
- Los uso cuando: Estoy terminando un empaste o necesito alisar entre los dientes o junto a las encías.
- Cómo los uso: Su forma se desliza entre los dientes o cerca de las encías para facilitar el alisado.
Fresas de rueda
- Los uso cuando: Necesito hacer surcos o rebajar un diente rápidamente.
- Cómo los uso: Como una mini sierra, estos cortan surcos o me ayudan a terminar los empastes molares rápidamente.
Formas especiales
A veces sólo basta con una fresa especial. Las fresas de corte final, de fútbol u ovaladas cubren esos casos extraños, como la realización de un orificio para un conducto radicular o el acabado del borde de una corona. Estas herramientas demuestran lo personalizadas que se han vuelto las herramientas dentales.

Tipos por uso/procedimiento
No tardé en darme cuenta de que la fresa "adecuada" depende de lo que esté haciendo. Cada trabajo necesita su propio tipo. Así es como desgloso lo que uso.
Fresas operativas
Para reparaciones dentales básicas -como arreglar caries o quitar empastes viejos- cojo mis fresas quirúrgicas. Las fresas redondas de carburo eliminan lo malo y las fresas de pera y fisura dejan espacio para el nuevo empaste.
Fresas quirúrgicas
Para operar, sobre todo para extraer dientes o cortar huesos, se necesitan fresas especiales. Las fresas Lindemann y las fresas para cortar hueso hacen el trabajo. Son más largas y resistentes, así que puedo partir dientes o alisar hueso con cuidado. Siempre las tengo limpias y a mano.
Fresas de acabado y pulido
Estas salen cuando quiero que un empaste tenga mejor aspecto y tacto. Las fresas de carburo multihoja dan forma y las fresas de diamante fino hacen que las cosas brillen. Muchos piensan que son opcionales, pero yo sé que convierten lo "suficientemente bueno" en "guau".
Fresas de laboratorio
En el laboratorio o cuando arreglo dentaduras postizas, utilizo fresas de laboratorio hechas para recortar plástico, trabajar en modelos o dar forma al yeso. Son más grandes y, aunque los pacientes no las ven, los resultados se notan en cada dentadura o corona que entrego.
Fresas de endodoncia
En los días de endodoncia, utilizo fresas como las fresas Gates Glidden o Peeso. Me ayudan a encontrar y dar forma a los espacios radiculares. Largas y delgadas, hacen el trabajo cuando nada más lo hace.
Fresas de ortodoncia
Después de quitar los brackets, utilizo fresas que limpian el pegamento sin dañar el diente. Las fresas especiales para ortodoncia hacen que esto sea fácil y seguro, lo que ayuda a los niños nerviosos a conseguir una nueva sonrisa.
Tipos de mango y ajuste de la pieza de mano
No hay nada peor que coger una fresa y descubrir que no encaja en tu pieza de mano. Yo lo he hecho, probablemente tú también lo harás, pero aquí tienes cómo no estropearlo tanto.
Fresas para piezas de mano de alta velocidad
- Friction Grip (FG) Vástago: Estas fresas cortas y delgadas encajan perfectamente en mi taladro de alta velocidad. Las utilizo para cortar esmalte o hacer coronas.
- Cuando los uso: Siempre que necesite velocidad, agua y control. ¿Cortar una cúspide entera o abrir una corona? Fresas FG, siempre.
Fresas de pieza de mano de baja velocidad
- Vástago tipo pestillo (RA) y recto (HP): Los tipos de cerrojo "encajan" en una broca de baja velocidad, mango recto para trabajos aún más lentos.
- Cuando los uso: Limpiar caries blandas, pulir, arreglar dentaduras en el laboratorio. La velocidad no es la clave, sino ser cuidadoso.
Obtener el vástago adecuado para la broca adecuada no es sólo cuestión de rapidez, sino de seguridad. No querrá que una fresa salga volando por la habitación.
En qué pensar al elegir un fresador dental
Elegir la fresa adecuada es como comprar zapatos. No todas las tallas o estilos sirven para todos los trabajos. Yo siempre me pregunto:
- ¿Qué estoy haciendo? ¿Es un empaste, una corona o una endodoncia? Cada uno necesita su propia fresa.
- ¿En qué estoy cortando? ¿Dientes, metal, hueso? Carburo para metal, diamante para cerámica, acero para material blando.
- ¿Qué velocidad necesito? Algunas fresas trabajan mejor rápido, otras despacio. Opte por lo que esté hecho para el trabajo.
- ¿Es cómodo y seguro para el paciente? La fresa adecuada reduce el ruido, los temblores y el calor. Además, a nadie le gusta ese olor a diente quemado.
- ¿Qué tamaño o rugosidad? Las fresas grandes son rápidas pero arriesgadas, las finas son lentas pero cuidadosas.
No hay una regla exacta, pero si practicas, elegir te resultará más fácil.
Limpieza, esterilización y vida útil
No es muy emocionante, pero sí muy importante. Los gérmenes no aparecen por sí solos, sino que se cuelan en las herramientas, sobre todo en las fresas. Así es como mantengo las mías limpias y afiladas.
- Limpieza y esterilización: Después de cada uso, froto para eliminar la suciedad y paso las fresas por un baño de ultrasonidos. Luego las meto en el autoclave para que se calienten y se limpien. Si no se hace esto, no sólo se corre el riesgo de infección, sino que también se estropea la fresa más rápidamente.
- Almacenamiento: Mantengo las fresas secas, en posición vertical y alejadas de la humedad. El óxido arruina una fresa y hace que corte peor.
- Cuándo tirar: Si una fresa está desafilada, salta, o la punta está rota o desgastada, la tiro. Las fresas de diamante duran unos 10-15 ciclos, y los carburos se desgastan más rápido si los usas mucho.
Una vez intenté utilizar una fresa sin filo durante una semana de más, y fue un gran error. El trabajo me llevó más tiempo, el paciente se puso nervioso y el empaste no quedó bien. No se arriesgue. Utilice fresas afiladas.
Conclusión: Elegir bien las fresas para un buen cuidado del paciente
Cuando recibí mi primer kit de fresas, no me imaginaba que estas pequeñas herramientas fueran a tener tanta importancia. Pero cuanto más trabajas en odontología, más te das cuenta de que no se trata solo de lo que ves con tus ojos, sino de saber qué herramienta elegir y cuándo.
- Apréndase las fresas.
- Adapte la forma, el tipo y la velocidad al trabajo.
- Manténgalos limpios y afilados.
- Mantente abierto a las novedades: las herramientas cambian constantemente.
Dominar las fresas dentales requiere tiempo, ensayo y error, y a veces te equivocarás. Pero cuando des en el clavo y consigas un buen empaste o veas a un paciente feliz, verás que merece la pena.
Aproveche mis lecciones para ahorrarse problemas. Que tu próximo trabajo dental sea un poco más fácil, y que tu trabajo sea más nítido, gracias a la fresa adecuada en tu mano.